Un día, inesperado, te levantas y ya no está. No tienes contigo sus caricias, no tienes sus " Buenos días mi amor ", no tienes nada y es por una simple razón. Tu te crees que una vez que la tienes ya no tienes que hacer nada , pero eso es un error, nos acostumbramos a la rutina, a la monotonía, al como ya esta con nosotros dejamos de hacer las cosas que hacíamos al principio, y como siempre cometemos ese maldito error.
Nunca dejemos de decirle a las personas que queremos lo importante que son, lo mucho que les queremos, porque quizás algún día, no estén con nosotros, y ese día nos arrepentiremos de no haberles dicho lo mucho que les queríamos. No se acostumbre a lo malo.
Nunca dejemos de decirle a las personas que queremos lo importante que son, lo mucho que les queremos, porque quizás algún día, no estén con nosotros, y ese día nos arrepentiremos de no haberles dicho lo mucho que les queríamos. No se acostumbre a lo malo.